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Detenido en Mijas el jefe de la mafia rusa Kemerovo, que iba a ser asesinado

Una banda rival había mandado a España a un sicario en medio de una guerra mafiosa en Estonia

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El jefe de la mafia rusa Kemerovo ha sido detenido en Mijas (Málaga), donde se había refugiado para protegerse de la guerra de bandas desatada en Estonia, donde la red mafiosa había extendido de tentáculos. Vyacheslav Gulevich dormía con un hacha y un machete bajo la almohada de su casa malagueña, ya que sabía que sus rivales habían mandado ya a España un sicario para matarlo.

El detenido había llegado a España tras el asesinato, en septiembre de 2016 del jefe de los jefes de las mafias de Estonia, Nikolai Tarankov, el hombre que controlaba la obshack o caja común de la delincuencia organizada dedicada a todo tipo de negocios (tráfico de armas, tráfico de drogas, extorsiones, prostitución, trata de seres humanos...).

"Su poder era reconocido desde los años 90, presidiendo las denominadas shodkas, a las que asistían los 15 'ladrones en ley' más influyentes. Tal era su poder que dichas reuniones eran conocidas en el ámbito delictivo como La mesa redonda”, reza la nota en la que el Ministerio del Interior detalla la operación conjunta de la Policía Nacional, la Guardia Civil y la Policía de la República de Estonia.

Pero una pelea con Victor Vorobei, el jefe de la banda que controlaba el tráfico de anfetaminas tras perder un cargamento de un millón de euros, desató la guerra. Y el jefe de los jefes fue asesinado de un tiro en la nuca durante una cadena de ajuste de cuentas y tiroteos por toda Estonia, una guerra por el poder de las mafias del país, de los territorios de negocio y de los distintos ámbitos delincuenciales. Por ello, el ahora detenido en Mijas, amigo íntimo del viejo jefe de jefes, escapó a España para esconderse, donde, de paso, estaba ojeando si montaba una base y se dedicaba a blanquear dinero.

La pista de Kemerovo (nombre de la ciudad industrial del mismo nombre) en España se reafirmó en junio, cuando fue detenido en Reus (Tarragona) Paata Sakhokia, un sicario rival que días antes había disparado en un hotel de Tallín contra varios jefes de la banda.

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"Todo indica que el motivo de su estancia en nuestro país estaba relacionado con dicha guerra de clanes y la localización de Gulevich para asesinarle", dice la nota. El jefe detenido en Mijas dormía con un hacha y un cuchillo enorme bajo la almohada, a pesar de que vivía en un casa convertida en un fortín.

La Operación Fulcrum-Carinatus ha permitido detener al jefe de la banda y también al lugarteniente del principal responsable del grupo, un experto en artes marciales que reclutaba a los “soldados” de Kemerovo en el gimnasio que regentaba. 

Las actuaciones han sido coordinadas por el Juzgado Central de Instrucción número dos de la Audiencia Nacional y la Fiscalía General de la República de Estonia. Está prevista la extradición de Gulevich en los próximos días.

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