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El paro baja en julio en 26.887 personas y la afiliación regresa a niveles de 2008

La Seguridad Social suma 56.222 ocupados en el mes y 644.337 en el año

FOTO: Varios obreros trabajan en la construcción de un edificio en Sevilla. Paco Puentes / Videoanálisis de Antonio Maqueda. Paco Puentes / EPVVídeo: Paco Puentes / EPV
Antonio Maqueda

La afiliación a la Seguridad Social siempre aumenta en julio gracias al turismo. Y esta vez no ha sido una excepción al sumar 56.222 nuevos cotizantes y alcanzar los 18,489 millones, una cifra no registrada desde diciembre de 2008. Sin embargo, el ritmo de creación de ocupados se ralentiza. La cifra es inferior al incremento de 84.721 trabajadores anotado en el mismo mes de 2016, los 58.792 de 2015 o los 62.108 de 2014. Los motivos: parece que la temporada turística se ha ampliado, empieza antes y, por lo tanto, se ha contratado antes. Además, la sequía lastró la ocupación del sector agrícola. Y, por último, el empleo venía creciendo a unas tasas anuales tan fuertes que se antojan difícilmente sostenibles.

Antes de la crisis, los incrementos de afiliación solían ser mayores en julio, por encima de las 100.000 personas. Sin embargo, todo apunta a que se ha producido un cambio de patrón. Los expertos señalan que con la mejora del turismo se ha adelantado la campaña. La contratación estival parece estar durando ahora más tiempo. Ciertamente, el riesgo percibido en otros destinos competidores del Mediterráneo favorece mucho al sector en España. Y eso ha trasladado una parte de la creación de empleo desde julio a los meses anteriores. 

Por otra parte, los secretarios de Estado de Empleo y Seguridad Social, Juan Pablo Riesgo y Tomás Burgos, han achacado a la sequía la caída registrada en el sistema especial agrario, que ha contabilizado una pérdida de 45.378 afiliados y ha desdibujado los datos globales. Los servicios de estudios de BBVA y Randstad han señalado que la mejora del mercado laboral ha sido menor de lo que se esperaba.

Mayor alza desde 2005

Si se toman los datos de los últimos doce meses, se han ganado 644.337 afiliados. La ocupación ha crecido con una fuerza que no se conocía desde 2005. Y precisamente en ese año se aplicó una regularización de inmigrantes que infló muchísimo las cifras. Gracias a semejante incremento, se alcanza un total de 18,489 millones de afiliados. El Ministerio de Empleo ha destacado que se han recuperado 2,4 millones de cotizantes, el 70% de los empleos perdidos con la crisis. Es decir, pese a que se han restablecido los niveles del Producto Interior Bruto, todavía faltan unos 700.000 trabajadores para poder recobrar las cifras precrisis de la Seguridad Social.

En estos momentos la afiliación avanza a tasas anuales del 3,61%, lo que supone una ligera desaceleración respecto al 3,87% que crecía en mayo y el 3,79% que sumaba en julio. Es decir, se aprecia una levísima ralentización del ritmo anual de creación de empleo. Pero esto se antoja algo normal porque los incrementos exhibidos están siendo incluso superiores a lo que crece la economía, un 3,1% anual según datos de junio del INE. Eso significa que la evolución de la productividad está siendo negativa. O lo que es lo mismo, se reduce la producción per cápita. Y eso no parece posible mantenerlo durante mucho tiempo. De ahí que probablemente esta tasa de crecimiento vaya poco a poco moderándose.

A pesar del empuje del turismo, la rama que más tiró del empleo fue la de actividades sanitarias y servicios sociales con 50.584 ocupados más, impulsada por los contratos de sustitución para el verano. Comercio y reparación de vehículos generó 44.388 puestos de trabajo más. Y ya en tercer lugar figura la hostelería con 39.253 nuevos ocupados. En las actividades administrativas y auxiliares se crearon 21.839 trabajos, y en la industria otros 13.896.

El desempleo cae

Por otra parte, el paro registrado descendió en julio en 26.887 personas. Solo que esta caída ha sido bastante menor que los 83.993 parados menos que se contabilizaron en el mismo mes de 2016 o los 74.028 de julio de 2015. Durante los últimos doce meses, la lista de apuntados al servicio público de empleo baja en 347.137 individuos y se sitúa en los 3,335 millones de desocupados. 

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Respecto a un año antes, el gasto en prestaciones cae un 8,65% hasta los 1.325 millones al mes. Esta cifra representa un desplome del 52% sobre el máximo de enero de 2013, cuando se desembolsaron 2.777 millones para unos 3 millones parados. En la actualidad, solo obtienen prestación 1,76 millones de desempleados, el 56% del total. O dicho de otro modo: 1,57 millones no reciben cobertura del seguro de paro.

Elevada rotación

Tras dos meses en los que el número de contratos realizados superó los dos millones, esta vez se ha quedado en los 1,928 millones. Aun así, sigue siendo una cifra muy alta, con un aumento de 112.000, el 6,19%. Todos los meses se está dando una contratación récord, lo que apunta que cada vez se encadenan más contratos durante menos tiempo y que, por lo tanto, la rotación en los puestos de trabajo está siendo más alta que nunca, un signo evidente de precarización laboral y del tirón que tienen sectores como la hostelería. Dicho esto, la contratación indefinida también está creciendo a ritmos del 10%. Aunque únicamente supone 151.998 del total suscrito, esto es, solo un 7,9%. 

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Sobre la firma

Antonio Maqueda
Periodista de la sección de Economía. Graduado en Periodismo en la Universidad de Navarra y máster por la Universidad de Cardiff, ha trabajado en medios como Cádiz Información, New Statesman, The Independent, elEconomista y Vozpópuli.

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