El Rey reclama mayor impulso político para afrontar los retos de la Unión Europea
Tajani defiende una Europa más segura y social en el Premio Europeo Carlos V a Oreja Aguirre
Felipe VI ha llamado este martes en el Monasterio de Yuste (Cuacos de Yuste, Cáceres) a no bajar la guardia ante los desafíos que tiene planteados el proyecto europeo, que pasa horas bajas tras la salida del Reino Unido y el aumento de partidos nacionalistas que postulan soluciones unilaterales fuera de la Unión Europea. “Se requiere un mayor impulso político por parte de todos y un esfuerzo equiparable a las circunstancias y retos que tenemos por delante”, ha exhortado.
En su discurso con motivo de la entrega del Premio Europeo Carlos V, que en su undécima edición ha distinguido al diplomático Marcelino Oreja Aguirre y representa el espíritu de la construcción de una Europa unida, Felipe VI ha recordado la capacidad de la Unión Europea para “luchar y superar numerosos desafíos” a lo largo de su recorrido. Sin embargo, y a pesar de las reacciones electorales favorables que están dándose en varios países frente a las amenazas, el Rey ha prevenido: “No podemos confiarnos, conformarnos y esperar a que todos los problemas se resuelvan por sí solos”.
En ese sentido, “pensando en el bien común y el interés general”, ha emplazado a reforzar la confianza en el proyecto europeo “mejorándolo, renovándolo inteligentemente” sobre la base de los valores comunes y compartidos. Con un objetivo: “Construir una Europa pacífica, unida, fuerte y próspera”, un proyecto que, por sus principios y valores compartidos por más de 500 millones de personas, ha calificado de “esperanzador y deslumbrante para el devenir de la Humanidad sobre la tierra”
El contexto y el entorno eran propicios para este alegato. Por una parte, el Día de Europa y la victoria electoral del domingo en Francia de Emmanuel Macron frente a la opción anticomuniatria de Marine Le Pen. Por la otra, un escenario cargado de significado europeísta: el Monasterio de Yuste, en Extremadura, donde el emperador-rey Carlos V, tras su abdicación y aquejado de gota, pasó el último tramo de su vida, entre 1556 y 1558.
A tono con el jefe del Estado español, el presidente de la Eurocámara, Antonio Tajani, ha descrito el recorrido de la Unión Europea como “un camino lleno de incertidumbres, de dificultades y tropiezos”. Pero, sin embargo, “un gran éxito colectivo que demuestra que el aislacionismo, el levantar muros, el nacionalismo y el populismo no son, ni serán nunca, la respuesta a los desafíos internos o globales a los que nos enfrentamos”.
"La trampa de los nacionalismos"
Recogiendo la palabra libertad de una cita de El Quijote, Tajani ha apuntado que fue “precisamente” el ansia de ella “lo que hizo salir a Europa de la trampa de los nacionalismos” después de dos guerras mundiales. El presidente del Parlamento Europeo, ha vinculado el futuro de la Unión Europea a la seguridad, la prosperidad y que sea “más social y más fuerte en el mundo”.
Una Europa “que lucha contra el terrorismo de manera coordinada”, en la que “las fronteras exteriores son cosa de todos”, “que genera crecimiento”, “capaz de asumir sus responsabilidades globales y de ser un factor de equilibrio mundial”. Una Europa “con amplitud de miras” y “que pone de nuevo a los ciudadanos en el centro del proyecto europeo”. Para el dirigente europeo, “la pertenencia a Europa es la aventura más importante que ha vivido España en el último siglo”
Tanto el Rey como Tajani han ponderado el papel del galardonado, Oreja Aguirre, el encargado de firmar hace 40 años el ingreso de España en el Consejo de Europa. “Un grandísimo europeísta español”, ha dicho el presidente de la Eurocámara, que “desplegó sus grandes e incansables dotes diplomáticas en favor del del proceso de construcción europea”, según el Rey.
El premiado ha mostrado su gratitud y ha reivindicado el legado de Carlos V, que ha compendiado en su carácter religioso, su sostenimiento de la fe y convicción en la paz. “Se trata de proyectar la integridad religiosa de antaño en la integridad ética de los principios y valores de al conciencia europea, humanista y democrática, frente al doble asalta del relativismo nihilista y el enroque de los viejos nacionalismos”, ha actualizado.
La Fundación Academia Europea de Yuste, impulsora del premio que arropa la Corona, pasará a denominarse por iniciativa de la Junta de Extremadura, de quien depende junto con la Comisión Europa, Fundación Academia Europea e Iberoamericana de Yuste, según ha desvelado el Rey en su intervención. El presidente del Gobierno regional, Guillermo Fernández Vara, ha apelado a la cultura democrática y a la conciencia europea para conseguir el progreso y la convivencia entre naciones.
En esta ceremonia han estado presentes, entre otros, la presidenta del Congreso de los Diputados, Ana Pastor; la secretaria general Iberoamericana, Rebeca Grynspan; los ministros de Asuntos Exteriores y Educación, Cultura, Alfonso María Dastis e Íñigo Méndez de Vigo, así como los embajadores en España de Bélgica, Polonia, Irlanda, Letonia, Luxemburgo, Hungría, Reino Unido, Austria, Malta, Portugal, Chipre y de los Países Bajos.
La de 2017 ha sido una edición especial al conmemorarse los sesenta años de los Tratados de Roma; el vigesimoquinto aniversario del Tratado de Maastricht y los cuarenta años desde que Marcelino Oreja solicitase, en nombre de España, la adhesión a las Comunidades Europeas, y firmara la adhesión de España al Consejo de Europa y al Convenio Europeo de Derechos Humanos y Libertades Fundamentales.
La "incansable labor" de Oreja
Con el Premio Europeo Carlos V, dotado con 30.000 euros, el jurado ha querido reconocer la contribución del político y diplomático Marcelino Oreja Aguirre (Madrid, 1935) al proceso de construcción e integración europeas desde los diferentes cargos que ha ocupado, tanto en organizaciones nacionales como europeas, entre ellos los de ministro de Asuntos Exteriores del Reino de España, secretario general del Consejo de Europa y Comisario Europeo. El jurado destacó su “incansable labor de fomento de la idea de Europa y del engrandecimiento de los valores europeos, especialmente los relacionados con la diversidad cultural europea y la protección de los Derechos Humanos”.
La presidenta de la Comisión Ejecutiva de la Fundación Academia Europea de Yuste y directora general de Acción Exterior de la Junta de Extremadura, Rosa Balas, consideró a Oreja como “un europeísta convencido y uno de los grandes protagonistas del proceso de integración europea”. Lo definió como un humanista que ha promovido siempre la idea de España como “parte constitutiva de Europa y la integración comunitaria como un elemento determinante para el futuro de nuestro continente en la sociedad global”.
El premio Carlos V fue instituido en 1995 para resaltar el espíritu europeísta de España. Con este galardón, la Fundación Academia Europea de Yuste reconoce la labor de personas que han contribuido al conocimiento general y engrandecimiento de los valores culturales, científicos, sociales e históricos de Europa, así como al proceso de unificación europea.
Entre otros, han sido distinguidos en diferentes ediciones José Manuel Durão Barroso, Felipe González, Javier Solana Madariaga, Jorge Sampaio, Jacques Delors, Mijail Gorbachov, Sofia Corradi o Helmut Kohl.
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