_
_
_
_
_

La muerte de un hipopótamo tras una brutal paliza conmociona El Salvador

Gustavito fue agredido en el zoo por desconocidos que le atacaron con hierros, piedras y picahielos

Personal del zoológico nacional, atendiendo al hipopótamo Gustavito en San Salvador.Vídeo: EFE
Jacobo García
Más información
Un vídeo muestra a osos esqueléticos en un zoo de Indonesia
La segunda vida de los elefantes víctimas de malos tratos
Pizza, “el oso polar más triste del mundo”, es trasladado temporalmente

La máxima expresión de la violencia que golpea El Salvador, uno de los países más sangrientos del mundo, saltó el jueves de las calles y barrios a la alberca del zoológico de San Salvador donde malvivía Gustavito, su único hipopótamo y uno de los animales más queridos.

El Gobierno confirmó el fallecimiento del inmenso animal a consecuencia de los golpes recibidos por uno o varios desconocidos que asaltaron las instalaciones del zoo de la capital. Su muerte ha provocado una oleada de indignación en las redes sociales del país. Periódicos y televisiones han cubierto el asunto al detalle en medio de la desolación colectiva por la brutalidad del ataque. El zoo estuvo cerrado temporalmente para intentar salvar al animal y la autopsia se ha seguido como si fuera una celebridad.

En el ataque, bajo investigación, se utilizaron "objetos contundentes y cortopunzantes", dijo la Secretaría de Cultura de la Presidencia.

Según el parte oficial, Gustativo, de 16 años y más de 1.500 kilos, único ejemplar de esta especie en el país centroamericano, sufrió "hematomas y laceraciones en la cabeza y cuerpo" que no pudo superar.

Por el tipo de heridas, las autoridades creen que fue atacado con piedras, picahielos y hierros afilados. El animal tenía cortes profundos en el hocico y la cabeza, por lo que los expertos deducen que trató de defenderse.

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

El hipopótamo Gustavito, cuyo nombre fue elegido por una votación popular organizada por La Prensa Gráfica, había llegado a El Salvador en octubre de 2004, tres meses después de la muerte de Alfredito, otro hipopótamo que vivió más de 28 años en el único zoológico público del país centroamericano. Los periódicos recuerdan que unas 25.000 personas acudieron aquel día al zoo para recibir a Gustavito.

Aunque El Salvador es uno de los países más violentos del mundo, en 2016 la tasa de homicidios fue de 81 asesinatos por cada 100.000 habitantes, la muerte del animal ha impactado a la opinión pública que ha seguido alarmada la agonía del hipopótamo, por absurda y por violenta.

"Lo que le hicieron a Gustavito, habla menos del pésimo zoológico que tenemos y más de lo enferma de violencia que está nuestra sociedad", escribió en Twitter el alcalde de San Salvador Nayib Bukele. El funcionario se ha sumado a las voces que piden el cierre del zoo y anunció que mantiene conversaciones para transformarlo en un ecoparque.

En los últimos años son muchos las denuncias públicas sobre las condiciones de vida de los animales debido al estado del recinto.

Anteriormente se ha registrado la muerte de una cobra y un león africano o se han documentado graves distorsiones en la conducta de los animales como un tigre que se comía su propio rabo o pájaros que se arrancaban las plumas.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Jacobo García
Antes de llegar a la redacción de EL PAÍS en Madrid fue corresponsal en México, Centroamérica y Caribe durante más de 20 años. Ha trabajado en El Mundo y la agencia Associated Press en Colombia. Editor Premio Gabo’17 en Innovación y Premio Gabo’21 a la mejor cobertura. Ganador True Story Award 20/21.

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_