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Las potencias occidentales piden a Siria, Rusia e Irán que acepten un alto el fuego en Alepo

El Asad dice que los avances en la ciudad cambiarán por completo el curso de la guerra

Un soldado sirio coloca una bandera nacional.Foto: atlas | Vídeo: H. AMMAR (AP) / ATLAS

Los líderes de Estados Unidos, Reino Unido, Alemania, Francia, Italia y Canadá reclamaron este miércoles, en un comunicado conjunto, un alto el fuego en la ciudad siria de Alepo, epicentro de un drama humanitario y en la que están avanzando las fuerzas del régimen de Bachar el Asad.

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“Condenamos las acciones del régimen sirio y de sus apoyos extranjeros, especialmente Rusia, por su obstrucción de ayuda humanitaria. Y condenamos fuertemente los ataques del régimen sirio que han devastado instalaciones civiles y médicas, y el uso de bombas de barril y de armas químicas”, reza el comunicado de los miembros occidentales del G 8, el club de los países más industrializados.

El texto insta a que se acuerde de forma “inmediata” una tregua “para que la ONU pueda llevar ayuda humanitaria” a las decenas de miles de personas atrapadas en el este de Alepo y pueda auxiliar a las que han huido de la ciudad.

Las potencias urgen a reactivar la búsqueda de una solución diplomática al asedio a la ciudad tras fracasar todos los intentos de Washington de negociar con Moscú, el principal aliado de Damasco, un alto el fuego en Alepo y una salida a más de cinco años de sangrienta guerra civil. Precisamente, este miércoles se reunieron en la ciudad alemana de Hamburgo el ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, y el secretario de Estado estadounidense, John Kerry, para abordar el polvorín sirio, pero no trascendió que llegaran a un acuerdo.

El comunicado se intuye como un último intento del Gobierno de Barack Obama de lograr desencallar el laberinto sirio, objeto de guerras entrecruzadas entre aliados y rivales regionales y globales. Es una incógnita qué papel adoptará Donald Trump, cuando asuma la presidencia de EE UU a finales de enero. En campaña, el republicano exhibió su afinidad con Rusia, con la que pidió colaborar más en Siria, y señaló que la caída de El Asad no debería ser una prioridad.

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“La oposición ha aceptado el plan de cuatro puntos de la ONU en Alepo. El régimen tiene que aceptarlo también”, señala el texto en referencia a la iniciativa de Naciones Unidas, estancada desde hace semanas, de entrega de ayuda y evacuaciones médicas en la ciudad. “Llamamos al régimen sirio a hacerlo urgentemente para aliviar la situación extrema en Alepo, y llamamos a Rusia e Irán a utilizar su influencia para ayudar a que esto ocurra”.

Los países también denuncian el bloqueo ruso en el Consejo de Seguridad de la ONU y la “falta de disposición de Rusia e Irán para trabajar en pos de una solución política” en Siria.

El Asad ve un punto de inflexión

El Asad no se ha hecho eco de la llamada de los países occidentales. En una entrevista al diario Al Watan, el presidente sirio considera que los avances de su Ejército en Alepo cambiarán por completo el curso de la guerra, informa la agencia Reuters. Sostiene que la ciudad es la “última esperanza” de los rebeldes y que la “decisión de liberar toda Siria está tomada y Alepo es parte de ella”.

En octubre, el enviado especial de la ONU para Siria, Staffan de Mistura, ya propuso un plan para evacuar de Alepo a los 8.000 rebeldes que se estima hay en la ciudad, iniciativa que cayó en saco roto.

La ciudadela de Alepo en la Ciudad Vieja, a principios de diciembre.
La ciudadela de Alepo en la Ciudad Vieja, a principios de diciembre.YOUSSEF KARWASHAN (AFP)

“No hay respuesta final aún pero se está evaluando muy seriamente la posibilidad de abrir un corredor hacia Idlib [bastión rebelde al suroeste de Alepo] para permitir la huida de los terroristas y sus familias y así evitar que haya bajas civiles”, aseguró una fuente cercana al Ejército sirio.

La solicitud internacional a un alto el fuego fue precedida por otra de grupos armados opositores de Alepo, que han quedado acorralados ante el rápido avance de las tropas gubernamentales. Varios grupos insurrectos entregaron sus armas mientras que otros se replegaron más al sur. En un comunicado conjunto, pidieron una tregua de cinco días para evacuar a civiles y heridos.

Sobre el terreno, se consolida el avance de las tropas del régimen. “Hemos logrado recuperar el 85% del territorio que controlaban los terroristas [en referencia a los diferentes grupos rebeldes apostados en Alepo]. Esperamos una victoria completa entre hoy y mañana”, declaró este miércoles en una conversación telefónica desde Alepo el general Samir Suleimán, portavoz del Ejército sirio.

Sobre los entre 100.000 y 250.000 civiles que permanecen atrapados en las zonas de combates, el general aseguró que “están siendo evacuados por los soldados y que cada minuto llegan más a sus puestos de control”.

“Los soldados se han hecho con toda la ciudad vieja y están a las puertas de Fardus [barrio de Alepo oriental] y los terroristas se baten en retirada”, aseguró, por su parte, el coronel Ayman Alí, del departamento de prensa militar sirio.

El 70 % de las ambulancias del este de Alepo están destruidas

El 70 % de las ambulancias en los barrios del este de Alepo que quedan en manos de los rebeldes están destruidas y, además, no hay combustible, por lo que no se puede trasladar a enfermos ni heridos, dijo este miércoles por teléfono a Efe el médico, Mohamed Abu Rayeb.

"Ahora mismo sufrimos una incapacidad absoluta para ofrecer servicios médicos", afirmó Rayeb.

"Hay escasez de oxígeno y de sangre para transfusiones, los heridos se mueren por falta de esto", indicó este cardiólogo, quien destacó que las condiciones de trabajo en los quirófanos no cumplen los requisitos mínimos para poder operar.

Actualmente, solo quedan dos centros sanitarios abiertos en los distritos orientales de la urbe, que siguen en poder de los insurgentes, tras los últimos avances del Ejército, según la fuente.

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