_
_
_
_
_

El narco y el lavado surcan el debate presidencial en Perú

Keiko Fujimori repitió su actitud a la ofensiva y Pedro Pablo Kuczynski asestó golpes hacia el final

Aunque los candidatos presidenciales Keiko Fujimori de Fuerza Popular y Pedro Pablo Kuczynski de Peruanos por el Kambio (PPK) delinearon sus propuestas de gobierno, el narco y el lavado de activos protagonizaron el segundo y último debate a una semana del balotaje, el 5 de junio. El economista dijo que de ganar su contrincante “corremos el riesgo de tener un narcoestado”, y recordó que de once congresistas fujimoristas electos investigados por lavado, cinco lo son por posibles conexiones con el narcotráfico.

Más información
La corrupción y el elitismo centran el primer debate presidencial en Perú
Cae el dirigente del fujimorismo investigado por lavado de dinero
Fujimori refuerza su populismo con medidas conservadoras

“El narcotráfico, la corrupción y el crimen son los tres jinetes del apocalipsis, eso explica mucho de la corrupción que está ocurriendo ahora, por eso es tan importante deslindar con el narcotráfico, y no tener ninguna asociación con el lavado de dinero”, afirmó el líder de PPK.

El candidato pidió a la hija del autócrata Alberto Fujimori explicar el hallazgo de droga en el almacén de una empresa de su hermano Kenji en 2013. “Como todo negocio, el de mis hermanos es atacado por el narco”, respondió la política que lo supera en 5,3% de acuerdo al simulacro de voto de Ipsos Perú, difundido el domingo.

En el almacén de la empresa del hijo menor del expresidente, ubicado en el puerto del Callao, la policía encontró 91 kilos de cocaína camuflada en rotores. Uno de sus socios, Miguel Ángel Ramírez, es primo hermano del congresista Joaquín Ramírez, financista de Fuerza Popular investigado por la agencia antidrogas de los EE UU, la DEA, y quien fue separado del cargo de secretario general del partido fujimorista el 19 de mayo, tres días después de que un reportaje televisivo de Univisión y América Televisión reveló la pesquisa en curso.

“Usted tiene un secretario general que todavía figura en la Sunat (entidad recaudadora de impuestos) como responsable de su partido”, le dijo Kuczynski a Fujimori sobre Ramírez, quien está en licencia del cargo mientras duren las investigaciones.

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

El exministro de Economía también criticó al postulante a la vicepresidencia por Fuerza Popular, José Chlimper. “Está involucrado en un escándalo por tratar de influenciar periodistas para cambiar versiones mediante audios”, añadió. Fujimori respondió: “el señor Chlimper entregó de manera transparente toda la información”.

Pedro Arbulú, el presidente del directorio de Panamericana Televisión, uno de los principales canales peruanos, renunció el sábado a su cargo luego de confirmarse que recibió de Chlimper, un audio para desacreditar al informante que reveló que la DEA investiga al congresista fujimorista Ramírez.

Dos periodistas del canal indicaron que el candidato fujimorista entregó dos USB, uno con un audio manipulado y el otro en el que el informante Jesús Vásquez se reafirma en su denuncia. El líder fujimorista y empresario agroexportador dijo esta noche en Radioprogramas que solo entregó un USB con varios archivos y no había escuchado el audio, aunque reconoció que su objetivo era desacreditar a Vásquez.

El Tribunal de Honor del Pacto Ético Electoral, un colegiado formado para cada elección por el Jurado Nacional de Elecciones, pidió la tarde del domingo al Ministerio Público que investigue la eventual comisión de un delito en la entrega de audios por parte de Chlimper.

Puesta en escena

Fujimori inició su participación en el debate con un saludo en quechua y otro en aymara, las dos principales lenguas indígenas, habladas en el sur del país, donde consiguió el menor porcentaje de votos en la primera vuelta. Además, cerró su mensaje final con “Kausachum, Perú”, (‘Viva el Perú’ en quechua, una expresión que popularizó el gobierno militar de los años 70).

“Estoy preparada, estoy lista”, repitió en dos ocasiones la candidata que intenta por segunda vez llegar a la presidencia –la primera fue en 2011- y que cuenta con un 53,1% de cédulas válidas, descartando los blancos y viciados del simulacro de votación de Ipsos Perú. La encuestadora destacó que luego del debate del domingo 22, la postulante se ha estancado en la intención de voto, su opositor bajó, y se incrementó el porcentaje de indecisos: un 13% podría cambiar su voto de aquí al 5 de junio o aún no sabe por quién lo hará.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_